Llevaba tiempo sin saber de ti y sin verte por Santa María. Algo me llegó de que estabas malusquillo pero que estabas mejorando.
La verdad es que hoy en el descanso del trabajo, me he llevado un duro golpe. Otro más para el mundo cofrade.
Ya estás delante de Él, de Jesús. Delante del que tanto hemos hablado. Ya no tendrás que quitarle la mirada, sino que lo tienes frente a frente, de Tú a Tú.
Se va un amigo con el que he derramado muchas lágrimas, delante de Jesús Nazareno. Uno de los grandes.
Aún recuerdo unas vísperas de Reyes es las que tuviste el privilegio de ser Rey Mago en el Pópulo y me contaste tu experiencia entre emociones. Y recuerdo el Besamanos Magno donde a puerta cerrada le hice las fotos a la Virgen de los Dolores. Cuantos cables me echaste, querido Miguel.
Te voy a echar de menos por Santa María.
Descansa en Paz, amigo Miguel
